Bajan hasta casi 1.440 las familias que acuden al Banco de Alimentos del Sil en los últimos meses

En cuanto al abastecimiento de alimentos, Esther Reyes respira aliviada después de los problemas que tuvieron con la leche y el aceite. Pero sobre todo con la leche, puesto que «en el segundo trimestre estuvimos muy agobiados porque no teníamos y nos estaba costando mucho encontrarla». De hecho, no podían acudir directamente a las empresas lácteas, así que tuvieron que comprarla en cadena. «Lo pasamos muy mal y más con la subida que ha habido de precios», aseguró.

Además, en el mes de octubre llegarán mucho litros de leche, gracias a la Federación Española de Bancos de Alimentos, «por lo que lo llevamos con menos preocupación».

El aceite también fue complicado «y económicamente por lo que estaba suponiendo». «Es otro alimento que entregamos, que hace mucha falta, es un alimento básico, pero está solventado, por lo que estamos aliviados», señaló la presidenta del BAS.

Para afrontar el funcionamiento ordinario del Banco de Alimentos del Sil, la ONG cuenta con un total de 43 voluntarios, una cifra que ha crecido en los últimos meses, donde se han incorporado tres personas.

Es un equipo «grande» pero suficiente, como indicó Esther Reyes, puesto que las instalaciones «no son muy grandes y si hay mucha gente no se trabaja bien», por lo que tienen que mirar por «la estabilidad del equipo y que se siga trabajando al mismo ritmo».

Los voluntarios y demás personal se reparten entre las instalaciones situadas en los bajos del estadio de fútbol El Toralín y en la nave en la que guardan la mayor parte del stock, en el antiguo parque de bomberos en Fuentesnuevas.

En esta última, en septiembre acometerán el arreglo del suelo, una obra que durará unos diez días y que después permitirá poner en funcionamiento la maquinaria que se solicitó a la Fundación Reina Sofía, después de la visita a Ponferrada de la reina emérita en octubre de 2022. La presidenta del BAS explicó que en un principio habían solicitado una furgoneta pero que decidieron cambiarla por una carretilla y una máquina de limpieza para dicha nave, que de hecho ya han recibido.

«Cumplió», aseguró Reyes, quien además indicó que la Fundación Reina Sofía ha ayudado mucho a los Bancos de Alimentos para mejorar sus instalaciones, «con cámaras de frío, carretillas, apiladoras, máquinas de limpieza, ha ayudado mucho a que podamos tener las instalaciones mejor, a que podamos tener mejor los alimentos y darlos. Es una suerte», concluyó.