La obra de Julio Llamazares llega a las aulas de la mano del IEB y de la profesora berciana Álida Ares

Al respecto, Llamazares reconoció que convertirse en protagonista de un libro le produce una «sensación extraña», similar a la de «ser el juez y el acusado a la vez». «Yo no sé nada de literatura desde el punto de vista teórico y a veces aprendo viendo lo que la gente deduce de lo que yo escribo», explicó el leonés, que bromeó con el hecho de que su obra se analice desde un punto de vista «forense-literario».

Por su parte, la autora del libro explicó que su idea central consiste en utilizar la obra de Llamazares como ejemplo de que «la literatura occidental es un continuo, desde los autores griegos y latinos hasta la actualidad», de ahí el «hilo de oro» que aparece en el título. Ares, profesora de español en varias universidades italianas, definió a Llamazares como uno de los autores contemporáneos más internacionales y confió en que su libro sirva para difundir la obra del leonés y sea también «un instrumento válido» para los profesores de lengua y literatura.

Al respecto, la presidenta del IEB, Patricia Pérez, señaló que este estudio pormenorizado de las obras de Llamazares se ha hecho llegar a los departamentos de lengua y literatura de todos los institutos de la provincia, con el objetivo de que los estudiantes de ESO y Bachillerato puedan acercarse a la figura de «un autor leonés conocido en todo el mundo». En la misma línea, el lingüista Ernesto Martín calificó al leonés como «una figura central de las letras españolas contemporáneas» y destacó su papel a la hora de «transmitir valores ligados a la naturaleza, al territorio y al legado histórico».

Preguntado por la situación que atraviesa en la actualidad el territorio leonés, Llamazares fue tajante. «Lo veo muy jodido», aseguró el autor, que lamentó la existencia de «dos Españas que ya no son las de Machado, sino una España creciente y una España menguante». En esa línea, el escritor subrayó que la falta de ayuda por parte de las administraciones condena a la provincia a convertirse en una «tierra del olvido».