La deuda millonaria de Emobi e Ibermon con El Bierzo: «Dejamos un pufo tremendo»

El cierre de la plantas de Emobi e Ibermon deja en la calle a 120 trabajadores y un reguero de deudas con El Bierzo.

El proceso concursal tiene consecuencias más allá de sus puertas y genera una larga lista de impagos con las empresas proveedoras de la comarca que podrían llegar a superar los dos millones de euros. Cantidad que se incluye en los 79 millones en los que se estima la deuda total que arrastran ambas compañías.

«Si aún me dices hay menos puestos de trabajo pero se liquida toda la deuda, por lo menos con los proveedores del Bierzo y León, porque a esa gente le dejamos un pufo tremendo», explica Ana Ormazabal, empleada de Emobi.

Reconoce que «el pufo es importante, de dos millones de euros para arriba». «Es que es mucho dinero y son unas empresas relativamente pequeñas, es decir, con un margen de maniobra muy escaso, tú les dejas a deber ciertas cantidades y claro no estamos hablando de grupos empresariales sino de pequeños distribuidores, gente que son básicamente autónomos, entonces ya no es solo que nos quedemos un montón de gente en la calle es que dejamos alrededor un agujero bastante potente», remarca.

Los proveedores principales de ambas compañías eran extranjeros pero el resto de materiales procedía de empresas bercianas, entre ellas las que les abastecían con equipos de protección (epis), lonas para proteger las torres, todo lo relacionado con la soldadura, cualquier tipo de recambio y maderas para fabricar las cunas de las torres, sin hablar ya de los materiales de estructura, del leasing del material informático y del mantenimiento.

«Hay un montón de procesos asociados a lo que es producir una torre eólica, desde transportes, grúas, un montón de distribuidores alrededor que se han quedado a verlas venir, materiales de oficina, de todo», asevera la operaria de Emobi.

Llama la atención como en este caso y a la vista de la situación que arrastran ambas compañías, en proceso concursal y con los trabajadores en puertas de un ERE extintivo, incluso desde la propia Junta de Castilla y León se apuntaba a Emobi e Ibermon como dos de las empresas que iban a tirar del proceso de reindustrialización de la comarca con el objetivo de generar 800 empleos directos y 2.400 indirectos y a las que fueron destinadas subvenciones millonarias que el Gobierno ha anunciado que investigará.

A la espera de que el juez abra el proceso de liquidación, el proceso concursal ha vivido su último capítulo después de que el Juzgado de Primera Instancia número 8 y de lo Mercantil de León haya rechazado las dos ofertas que había presentado el grupo inversor Investment Proyects 2007 y Sistemas Siderometalúrgicos 2020 para hacerse con las unidades productivas de las plantas de fabricación de torres eólicas y estructuras metálicas situadas en los polígonos industriales de La Llanada en Ponferrada y Bierzo Alto en Bembibre.

«Se verá cuando se pueda liquidar las instalaciones a ver qué es lo que queda para los proveedores», concluye Ormazabal.

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