Los escaladores de Ponferrada entran en calor: «Ahora estamos en camiseta y disfrutando»

«Ahora estamos en camiseta y disfrutando, es una maravilla», señala Jose Orvin, uno de los escaladores de Ponferrada, tras conseguir, por fin, entrar en calor en un rocódromo municipal en el que han venido soportando durante años temperaturas más frías casi que en el mismísimo Everest.

Los Reyes Magos atendieron sus peticiones solucionando finalmente los problemas de calefacción de las instalaciones. Esta es la sorpresa que aguardaba a las decenas de aficionados el final de las vacaciones y con la que se han encontrado cuando este martes, 7 de enero, han retomado sus entrenamientos.

La Concejalía de Deportes ha cumplido así su promesa y ha acometido los trabajos de reparación de la calefacción de las instalaciones situadas en la zona deportiva de El Toralín. Lo ha hecho aprovechando las semanas en las que el rocódromo ha permanecido cerrado al público coinciendo con las fiestas navideñas para buscar una solución definitiva al problema de la calefacción.

De esta forma, el Ayuntamiento cumple el compromiso anunciado por la concejala de Deportes, Eva Gonzalez. «El sistema de calefacción del rocódromo municipal lleva años dando problemas y es ahora cuando se ha tomado la decisión de actuar para tratar de solucionarlos definitivamente», señaló.

Dicho y hecho. Los técnicos han solventado el problema con la climatización de las instalaciones deportivas que estaba provocado «por una avería en el circuito», según reconoció la edil. Además, también se ha acometido la reparación del cañón de aire caliente que se ha utilizado como solución provisional en alguna ocasión para poder combatir las gélidas temperaturas que ha llegado a alcanzar el recinto.

Una situación que suscitó el malestar y las críticas de los aficionados a la escalada contra el Ayuntamiento ante la imposibilidad de utilizar así las instalaciones, lo que les llevó a iniciar una campaña de recogida de firmas a través de la plataforma Change.org.

Así las cosas, la reparación de la calefacción animó este martes, 7 de enero, la llegada de aficionados a las instalaciones que se mostraron satisfechos de poder retomar la práctica de la escalada en condiciones de confortabilidad en el rocódromo de la capital berciana, uno de los más destacados de la zona noroeste y al que el lastre provocado por los problemas de la calefacción estaba echando por tierra.

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