Hojas podridas y malos olores: así están las fuentes y acequias de La Rosaleda

Hojas podridas y malos olores. Es el panorama con el que se codean día a día desde hace ya semanas los vecinos del barrio de La Rosaleda de Ponferrada.

Se trata de una estampa que invade las fuentes y acequias del bulevar central y que inunda con un desagradable hedor el paseo por esta zona de la capital berciana, frecuentemente utilizada por los ponferradinos en algunos de sus momentos de ocio, también por parte de niños y ancianos.

Aunque los estanques no se encuentran en funcionamiento desde la llegada del frío tampoco se han vaciado y el agua estancada se ha llenado por completo con las hojas caídas de los árboles que circundan la zona. Un caldo de cultivo perfecto para que se acaben pudriendo, lo que provoca un olor desagradable a los usuarios habituales de este espacio de la ciudad. Una situación que se repite también en el caso de las acequias donde llaman la atención las hoja podridas que salpican este espacio ajardinado del bulevar.

La Asociación de Vecinos de La Rosaleda se ha hecho eco del malestar que este problema está generando entre los habitantes de este barrio situado junto a uno de los emblemas arquitectónicos de la ciudad, la popular torre de La Rosaleda. De hecho, «ya han sido varios los vecinos que nos han hecho llegar sus quejas», explica su presidente, Pedro José Villanueva.

Por ello, anuncia que una vez que pase el periodo navideño se dirigirán al Ayuntamiento para instarle a que tome medidas y proceda a realizar las labores de limpieza necesarias en las instalaciones con el fin de poner fin de adecentarlas y poner fin a este problema.

Precisamente esta será una de las peticiones que desde el colectivo veicnal del barrio de La Rosaleda harán llegar al equipo de gobierno que preside el 'popular' Marco Morala, a las que, según ha avanzado Villanueva, sumarán alguna solicitud más para reclamar mejoras en el barrio.

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