Roldán confía en que el impuesto para aceros extracomunitarios ayude a aumentar los pedidos

Cabe recordar que en el mes de junio se había aplicado de nuevo el ERTE que la dirección de la empresa, perteneciente al grupo Acerinox, aprobó en marzo del 2022 y que se prorrogó por un año más. Por lo que, desde el 5 de junio al 10 de julio el 60 por ciento de la plantilla se vio afectada por este expediente.

La situación sigue «más o menos complicada» en la factoría ponferradina, pero confían que las medidas que se están tomando desde la Unión Europea ayuden a aumentar los pedidos. En ese sentido, Juan José Núñez explicó que a partir del mes de octubre habrá un nuevo impuesto para los aceros de fuera de la Comunidad Económica Europea, «que es un 20 por ciento de aranceles para pagar la descarbonización» y con el que confían que «se equilibre la balanza en la competencia de productos».

«A raíz de eso imaginamos que las cosas vayan mejorando», añadió el presidente del comité, que aseguró que la empresa «no nos ha dicho que vaya mal» pero son conscientes de que el mercado está fluctuando, sobre todo los precios de la energía, el coste de las emisiones y todo esto influye en el precio del acero que se produce en España «y la competencia con otros países de fuera de la UE es una competencia desleal en estos aspectos, no tienen prevención de riesgos, no se preocupan de contaminar y todo esto es un sobrecoste para el producto que nosotros hacemos aquí».

Aún con todo ello, tienen esperanzas y aseguran que «de momento no hay ningún tipo de miedo».