Ponferrada se ilumina de morado por un futuro de igualdad

«Sabemos y no es ningún secreto que la ley Trans genera debate y diferencias en el feminismo pero eso no significa que estemos en la misma lucha, precisamente en estas amenazas que tenemos sabemos que vamos a estar unidas y que nos van a tener enfrente y que el sistema patriarcal nos van a tener enfrente», aseguró Prada. Por ello cree que «cuantas más nos asociemos, cuanto más organicemos, más agenda tengamos, bienvenidas seamos».

Con un Ayuntamiento de Ponferrada iluminado de morado, el colectivo apeló a la lucha continua del feminismo, ya que «a la vista está que por cada dos pasos que avanzamos a veces hay amenazas de tres de retroceso» y señaló que todavía hay mucho pendiente para lograr romper la brecha salarial, los techos de cristal o para conseguir la abolición de la prostitución o los vientres de alquiler. «Es otro tema pendiente y ahora candente con el conflicto de Ucrania, estamos viendo cuantas mujeres estaban sometidas por supervivencia a mercadear con sus vientres, con sus cuerpos», aseguró Nancy Prada, para la que la amenaza de la ultraderecha en Castilla y León es también un aviso para el retroceso, en definitiva, para «castigar los avances y los derechos sociales de las mujeres».

Un manifiesto entre generaciones, entre una niña y una mujer con 70 años de diferencia, «en el que el presente y el pasado tienen mucho que decir al futuro», marcó también el acto reivindicativo, en el que estuvieron presentes ciudadanos, sindicatos y numerosos representantes políticos, tanto del Ayuntamiento de Ponferrada como del Consejo Comarcal.

«Hay que continuar y hacer un llamamiento de compromiso porque esto es responsabilidad de todas y de todos», añadió la portavoz de la Plataforma, quien consideró que en el futuro «no nos podemos relajar». «La historia está ahí escrita, un 8 de marzo de 1917 mujeres rusas en una ciudad rusa se manifestaron para pedir paz y pan y quien nos iba a decir que un 8 de marzo de 2022 mujeres rusas y ucranianas están pidiendo paz y pan en el mismo momento, en las mismas condiciones y con el peligro de dar pasos agigantados hacia atrás, así que no nos podemos relajar», concluyó.