Ponferrada valora los daños del aguacero que inundó la ciudad y provocó 52 intervenciones de los bomberos

Los datos actualizados del último balance del servicio de Bomberos de la capital berciana arrojan un total de 52 actuaciones para atender principalmente los problemas ocasionados con inundaciones en calles y garajes.

La escena más llamativa se produjo en el paso inferior de la calle Ortega y Gasset, bajo las vías del ferrocarril, cuando un vehículo quedó atrapado por las aguas y su conductor logró salir con el agua cubriéndole hasta la cintura. Dicho paso se abrió en torno a las 00:30 horas después de proceder a la limpieza de la calzada.

El aguacero convirtió también en lagos algunas de las calles de la ciudad como es el caso de la avenida de Molinaseca donde la mediana que separa los cuatro carriles (dos por sentido) se hizo invisible tras quedar inundada por la gran cantidad de agua acumulada convirtiendo el vial en un auténtico río.

Una situación similar se vivió en el aparcamiento situado junto al albergue de peregrinos San Nicolás de Flüe, en la zona alta de la ciudad, donde la gran cantidad de lluvia caída hizo imposible que la red de pluviales pudiera darle salida.

También se vieron afectadas la Avenida Huertas del Sacramento, con desplazamiento de contenedores, la calle Doña Beatriz y el parking de la calle Río Urdiales.

A su vez, en la zona alta, la lluvia y por momentos las fuertes rachas de viento provocaron el desprendimiento de una parte de la cubierta de las instalaciones de la estación de servicio de La Peregrina.

Los bomberos tuvieron que levantar en varias vías públicas algunos imbornales para favorecer la evacuación del agua (C/ Rio Urdiales, Avd. Huertas del Sacramento, Glorieta de las Pimentras, Avd. La puebla y Avd. Molinaseca), mientras que el resto de casos se solucionaron por sí solos una vez que cesó la lluvia y el sistema de saneamiento tuvo capacidad para absorber la gran cantidad de agua caída.

Con respecto a los inmuebles, se vio afectada gran parte de la ciudad desde la calle la Asunción en Flores del Sil, pasando por los barrios del Temple, La Estación, Fernando Miranda, La Puebla, Huertas del Sacramento, Barrio de los Judios y zona alta. Tampoco se libró del agua el Teatro Bergidum, que sufrió inundaciones en sus sótanos, que pueden haber causado daños, pendientes de evaluación, en elementos eléctricos del escenario.

También destacar las sufridas en el entorno de las avenidas de Molinaseca y del Castillo, zona en la que se concentró un importante número de incidencias. Tanto en esta zona como en el resto de la ciudad se vieron afectados principalmente garajes, sótanos, bodegas y huecos de ascensor, así como diversas viviendas que sufrían filtraciones de terrazas o pisos superiores a los que había entrado el agua.

De este modo, los bomberos intervinieron en un total de 33 ubicaciones, mientras que las demás se comprobó in situ o vía telefónica que no era preciso su intervención al solucionar el problema los propios vecinos o bien que con el paso del tiempo la inundación había cesado.

A las 23:30 horas ya se habían atendido la totalidad de los avisos recibidos, prolongándose las actuaciones hasta las 2:30 horas de la madrugada.

Se movilizaron un total de 4 equipos de trabajo con 8 bomberos, más 2 bomberos realizando tareas de coordinación para establecer las prioridades. También fue movilizado personal de Protección Civil que acudió a diversas ubicaciones para informar a la población y evitar riesgos para la ciudadanía.

El concejal de Seguridad, José Antonio Cartón, señaló a elbierzonoticias que los principales problemas se ocasionaron por la imposibilidad para la red de saneamiento de dar salida a la gran cantida de agua caída.

«Casi bajó el agua en el mismo tiempo que subió», destacó Cartón, que puso de relieve el «colapso» provocado en la red de saneamiento «en la evacuación del agua que cayó en muy pocos minutos». Considera que la situación excepcional que se vivió provocada por el aguacero hizo «inviable» darle salida por la red de saneamiento. «La caída de esa manera y en tan poco tiempo es inviable que la admita la red», recalcó.

Según las primeras estimaciones, el aguacero dejó en torno a 30 litros por metro cuadrado entre las 19.30 y las 19.45 horas, anegando calles y colapsando la red de saneamiento, lo que hizo que algunas alcantarillas se vieran superadas y comenzaran a expulsar agua.

Pasadas las ocho de la tarde y de forma paulatina la ciudad fue recuperando la normalidad, si bien todavía entrada la noche los servicios de Emergencias continuaban achicando el agua que inundó algunos garajes.